Material y metodología: Obtuvimos hombros de diferentes especies: perro (beagle), cerdo (mini-pig), conejo de Nueva Zelanda, liebre, cordero y oveja adulta. Extrajimos las articulaciones escápulo-humerales de ambos lados. Efectuamos una radiografía en cuatro proyecciones (antero-posterior, axial y dos oblicuas) y un TAC con reconstrucción tridimensional. Posteriormente disecamos las piezas para analizar el espacio subacromial y
la cavidad glenoidea.
Resultados: Ninguna de las especies analizadas posee un acromion desarrollado ni coracoides para definir un espacio subacromial. El cerdo presenta una cápsula posterior más desarrollada que la anterior y un m. subescapular desarrollado y el m. bíceps presenta un tendón en su porción larga pequeño y extraarticular con una corredera bicipital profunda. La oveja presenta un labrum superior desarrollado, con un tendón de la porción
larga del m. bíceps en una corredera poco profunda.
Conclusión: No hemos encontrado un modelo experimental adecuado para estudiar la patología del espacio subacromial. La oveja y el cerdo pueden ser buenos modelos para estudiar la patología de la glenoides