Transformación y Resiliencia, en el que el sector energético tiene un claro protagonismo.
En particular, de los veinte programas tractores de inversión incluidos en el plan, la energía concentra un esfuerzo muy significativo,
alcanzando cerca de 30.000 millones de euros en los próximos años, destacando las inversiones en movilidad sostenible y rehabilitación
energética de edificios.
Esta importancia está ligada al gran reto que supone la transición energética para nuestro país, y así ha quedado consagrado en la Ley
7/2021, de mayo de 2021, sobre cambio climático y transición energética, que incluye ambiciosos objetivos en materia de energías renovables,
eficiencia energética y reducción de emisiones.
El monto de inversión necesario para acometer con éxito esta transición podría superar los 240.000 millones de euros en el horizonte
2030, y de ahí su importancia para el crecimiento y la recuperación económica