520 | | | $aEn el presente trabajo se pretende llamar la atención sobre el estado actual de las limitaciones en el uso y venta de creosotas, sobre su problemática, sus vías de entrada, así como sobre las distintas posiciones de varios países de la Unión Europea.Desde siempre la madera ha sido utilizada por el hombre como materia prima, en construcción, en la elaboración de armas o herramientas, en la agricultura, o simplemente en objetos decorativos. Este uso tan temprano, unido a la preocupación por la protección de la misma, ha permitido un conocimiento empírico sobre sus propiedades, así como una aplicación de las mas diversas formas de tratamiento y conservación, técnicas que han ido evolucionando a lo largo de los siglos, y que van desde la simple carbonización superficial de la madera en las embarcaciones antes de proceder a calafatear las juntas, hasta la más moderna protección química de la madera. Ya en el Siglo XX podemos destacar el empleo por impregnación de la Creosota para el tratamiento industrial de postes y traviesas. En España entre los años 1896 y 1968, y dado la importancia creciente del ferrocarril, del sector eléctrico y de comunicaciones se instalan numerosas plantas de creosotado, tras este periodo desciende el numero de plantas dedicadas al creosotado y se observa una tendencia al uso de otros protectores para la madera. Ya desde 1984 es más que significativo el paulatino abandono de la traviesa de madera y en menor escala de los postes de conducción eléctrica, también de madera, y se observa una tendencia al abandono de la creosota en nuestro país |