520 | | | $aDentro del sector sociosanitario y, particularmente, en profesiones que se ejercen en el ámbito asistencial, existen numerosas tareas que pueden requerir movilizar a una persona o transferirla de una superficie a otra. Son muchas las situaciones que pueden precisar la movilización de pacientes: higiene personal, reposicionamiento para evitar lesiones, traslado para la realización de pruebas diagnósticas, etc. Las capacidades funcionales de la persona a movilizar pueden ser también muy variadas, desde una recuperación tras una intervención quirúrgica hasta dependencia o semidependencia crónicas derivadas de enfermedades físicas, sensoriales o mixtas. La ejecución de estas tareas implica, para el personal que las lleva a cabo, la posibilidad de que puedan sufrir trastornos musculoesqueléticos de origen laboral, con la consecuente aparición de molestias y dolores que es necesario evitar. El objetivo del presente artículo es ofrecer recomendaciones para llevar a cabo este tipo de acciones de la manera más segura posible, tratando así de minimizar al máximo la exposición a riesgos derivados de la movilización o transferencia de personas. |