El Dolo y la culpa grave en el contrato de seguro

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      <subfield code="a">El Dolo y la culpa grave en el contrato de seguro</subfield>
      <subfield code="c">José A. Badillo Arias</subfield>
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      <subfield code="a">No parece razonable que tenga cabida en el seguro la cobertura de los actos dolosos de los asegurados ni de las personas por las que deban responder. Amparar hechos intencionados de los asegurados va en contra de la licitud de los contratos, de los principios del seguro -no existe el alea que es consustancial al contrato de seguro- y, además, se excluyen expresamente en las pólizas. Esta cuestión, que es pacífica en los seguros de daños y de personas en los que la relación se establece entre el asegurador y el asegurado, no lo es en los seguros de responsabilidad civil, en los que aparece un tercero, ajeno a la relación jurídica asegurador/asegurador, al que la Ley le otorga una protección especial, en virtud, sobre todo, de la posibilidad del ejercicio de la acción directa del artículo 76 LCS. En este trabajo se analiza la polémica que se da entre los artículos 19 y 76 LCS. Mientras el primero, norma aplicable a todas las modalidades de seguro, no da cabida a los actos causados por mala fe de los asegurados; el segundo, en cambio, permite reclamar a la aseguradora, incluso en los supuestos de hechos dolosos de los asegurados</subfield>
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      <subfield code="t">Revista de la Asociación Española de Abogados Especializados en Responsabilidad Civil y Seguro</subfield>
      <subfield code="d">Granada : Asociación Española de Abogados Especializados en Responsabilidad Civil y Seguro, 2002-</subfield>
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      <subfield code="g">01/01/2010 Número 33  - 2010 , p. 9-30</subfield>
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